A veces parece que uno vive en un mundo diferente. O por lo menos los que como yo, nos criamos con el rock, pillamos (aunque por lo pelos) el olorcito de la era hippie, conocimos parte de la guerra fría y la demonización de las fronteras, y formamos parte de la ruptura generacional de los 60-70. A veces, te digo, me siento como si fuera marciano. O me estuvieran tomando el pelo.
Leído en BBC News Online:
El material nuevo llega 36 años después de que la estrella se convirtiera en un icono para el movimiento opuesto a la guerra con Ohio, su respuesta a las muertes de cuatro estudiantes durante una protesta contra la guerra de Vietnam.
He seleccionado sólo el último párrafo. Parece que durante estos 36 años, Neil estuvo perdido por el Amazonas. Como si no hubiera escrito él solo un capítulo de la historia de la música en el siglo XX. Como si lo único importante es que ha escrito una canción contra ese individuo.
A veces pienso que a la gente la hace más o menos grande, los enemigos que tiene y ese individuo ha tenido suerte: le ha tocado un gran enemigo. Es posible que permanezca ahora en la Historia más tiempo del que pensaba.
Bueno, no me hagas mucho caso. A lo peor es que el polvorón de las fiestas pasadas que me tomado para merendar me ha debido cortar la digestión.
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