La Precuela del "Rust Fest"

 Este texto a modo de felicitación por los 20 años de la playa, nos lo envía nuestro querido amigo R.Xan Lamas. Organizador del pedazo de Rust Fest de Xunqueira en Ourense, diría que es la única persona que no se ha perdido ni un solo Rust Fest y siempre está ahí disfrutando y pegando votes cuando los conciertos llegan al climax. Gracias de corazón amigo Xan. Abrazote

“Love and only love” comenzó a sonar a las diez y diez minutos de la noche en el recinto portuario de Oeiras,a unos pocos kilómetros de Lisboa. El Tío Neil tenía que haber comenzado su actuación a las diez menos veinte según el programa del “Optimus Festival” (una especie de Movistar portugués).

 

En aquellos dias ya sufríamos una ola de calor, asi que si imaginamos que habíamos llegado a la enorme explanada del muelle a las cinco de la tarde y que esta era un recinto completamente pelado, a la hora que el Tio comenzó su actuación ya os podeis imaginar el tiempo que nos dio para trasegar mas de media docena de “superbock” (la mejor y más afamada birra portuguesa); más aun cuando en plena canícula ( a las siete de la tarde) salió un “cantautor” australiano llamado Xavier Rudd (extraño nombre para un “aussi”) para deleitarnos con un concierto de cornamusas australianas que median más de dos metros y medio cada una (eran dos) y que emitían sonidos más propios de las cabras montesas escocesas que del desierto australiano....Y no era malo el tal Xavier, solo que aquel día le había dado por aproximarnos al folklore de su país sin avisar y así fue como nos fuimos retirando hacia la parte trasera de la explanada en busca de alguna sombra salvadora.

 

¿Sombra? Ja. La única sombra de toda la explanada la daba un minúsculo ejemplar de platanero que supongo que había surgido por generación espontánea en aquel lugar. La sombra podía decirse que era de broma ya que no daba ni para tapar una sombrilla recogida...pero es que además (cosa evidente por otra parte), la sombra ya estaba “ocupada”.

 

Yo en aquel momento no conocía a ninguno de los cinco que se intentaban tapar en aquella sombrita. Los conocería más o menos dos años más tarde, pero de todas formas aquella “trouppe” se me quedó grabada en la cabeza. Se turnaban entre ellos (bueno tambien había una ella) para coger la sombra que se proyectaba sobre el alquitran del muelle. Todo un espectáculo, eso si. Si conoceis a Luis y Ricardo de Valdoviño ya os podeis hacer una idea de lo que era verlos intentando turnarse para atrapar la sombra deseada. Si tambien conoceis a Edu y a Hector (tambien de Valdoviño) pues podeis imaginar la enorme ventaja que estos dos tenian sobre los primeros. Pero la más afortunada seria Vicki (si, si, tambien de Valdoviño) ya que en aquel momento estaba tal y como la conocemos a día de hoy, es decir una esbelta silueta que combinaba perfectamente con la “sombrita”.

 

Es@s eran l@s cinco personajes que yo no conocia en aquel tiempo, pero que marcaron el momento que para mi fue el nacimiento (dos años más tarde) del “Rust Fest.”. (Un poco más adelante explicaré como y porque, no seais impacientes).

 

El Tio tuvo que esperar a que Donovan Frankenreiter (yanqui el a pesar del apellido) acabara su concierto para poner la maquinaria a punto. Nuestro Neil era el cabeza de cartel a pesar de que posteriormente el que cerraria el Festival seria Ben Harper  & The Innocents Criminals. Y se empleó a fondo nuestro Tio. Nos quiso dar tralla desde el comienzo y mirad que Set list se pegó:

 

Love and only love

Powderfinger

Spirit Road

Cortez  Cortez

Rockin´ in the free world

Oh Lonesome me

Mother Earth

The needle and the damage done

Unknow legend

Heart of gold

Old man

Get back to the country

Words

No hidden path

 

Y como bonus : “A day in the life”, rompiendo como no todas las cuerdas de su “Old Black”.

 

Es decir un concierto al reves de los que nos tenia acostumbrado. Caña  desde el principio (hasta el Rockin´), reposo country pero maravilloso hasta Words, y de nuevo la bomba con los dos últimos temas. Uno de los conciertos de los que mejor recuerdo me han dejado a través de los años.

 

Con todo ello y dejando pasar un par de años (con el concierto de Barcelona y Donosti por medio al año siguiente) se fueron configurando las futuras amistades a través de la página de “En la Playa de Neil”, que dieron fruto un día cuando el inefable Ricardo “Crazy Pony” nos anunció que ya tenía los permisos oportunos para celebrar el 1º Rust Fest en Valdoviño. Por el medio la creación de la mejor banda tributo al Tío Neil y la implicación de muchísimos amigos en el proyecto…

 

Pero aquel concierto de Oeiras…para mi lo fue todo.

 

Gracias AMIGOS.