Ahora viene un chico y te dice que tu música le parece cojonuda pero que la tiene toda descargada. ¿Qué le dices?
Pues le digo que es una pena, que qué putada porque los discos están muy bien. Me sentaría a hablar con él. He visto a artistas a los que le han preguntado en la tele la pregunta del millón: “Entra un tío en tu camerino con un disco pirata, ¿se lo firmarías?” Y dicen que sí, para quedar estupendos. Nadie quiere decir nada que les pueda perjudicar. Pues en vez de decir sí, me gustaría decir “ven, entra, ¿no tienes pasta para el disco? Te lo regalo yo”. El que me conoce, la gente que es habitual mía, sabe que soy extremadamente generoso. Yo doy conciertos y en la entrada regalo discos y libros a la gente, desde siempre. He dado un concierto, se ha grabado la primera parte, a la gente le hemos regalado el CD y en su casa se ha podido descargar el concierto entero 24 horas más tarde. He sido siempre generosísimo en eso. Cuando alguien no ha tenido dinero le he mandado el disco. Ahora me llama mucha gente porque no encuentran “El tocho cheli” y yo se lo mando. A ver, no puedo mandar veinte mil, pero mando los que mando. ¿Por qué un chaval se descarga ilegalmente toda la colección de un artista que le gusta? Primero porque puede hacerlo. Segundo, porque está oyendo que, moralmente, se puede hacer. Y tercero, porque hay una polémica abierta en torno al precio de las cosas y a la cultura de lo gratis, que yo, sinceramente, jamás pensé que se fuera a producir. Porque yo no he dudado en pagar tres mil pelas por un vinilo cuando tenía diecisiete años, aunque tuviera que juntar cinco para pagarlo. Tengo vinilos comprados en el rastro, por ejemplo el “Tonight, tonight” de Neil Young en cartón duro de verdad, el “Thick as a brick” de Jehtro Tull completo, el “Aladdin Sane”, que se abría o uno de mis favortios de esa época, el “If I could only remember my name”, el disco en solitario de David Crosby, que en España no salió y tocan medio Jefferson Airplane, medio Grateful Dead, tocan también Nash y Young y pone detrás 3.750 pelas. ¿Sabes lo que eran 3.750 pelas cuando tenía diecisiete años?
15 febrero, 2010
A Ramoncín también le gusta Neil Young
Pues sí, aquí tienes un extracto de una entrevista en efe eme: (y si quieres leerla completa, sigue el enlace).
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3 comentarios:
Por mi parte, Don Ramón puede dormir tranquilo: ni le voy a pedir discos, ni le voy a grabar concierto, ni le voy a descargar nada, nada, nada... pero vamos, nada. Lo juro por Neil... je,je.
Y a ver cuando se entera que la "cultura" que se baja de internet no es gratis... que, entre otras cosas, le pago 45 pavos mensuales a Telefónica, una pasta a Endesa y otros pagos en especies (publicidad y demás). Si tanto lo necesita, que vaya a pedirle dinero a esos colegas.
Pues eso mismo dice él también en la entrevista, que no es gratis porque le pagamos a Telefónica o Vodafone o la que toque.
Ya podía haberse llamado Eustaquio el individuo. Las salvajadas de la SGAE no son justificables. El nombrar a todos los consumidores delincuentes y el canon preventivo, tampoco. Y si, que le vayan a pedir a las telefónicas. Aquí en España el ADSL va muy atrasado, es mas lento y caro que en otros sitios. Por lo tanto ganaran bastante mas que en otros lados. A mi me saca 40€ Jazztel...y es "barato".
Es un tema para hablarlo largo y tendido, pero los melómanos coleccionamos discos originales y lo que a la industria le duele es la descarga masiva de los éxitos del momento (basura). Eso les pasa por construir una industria de beneficios rápidos sin calidad con pseudo artistas/cantantes/grupetillos.
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